miércoles, 1 de agosto de 2012

"La Caravana Mágica. Volumen 2", de Gustavo Cordera

La historia (sobre todo en el cine) dice que las segundas partes no son buenas. A la vez, los terceros discos suelen ser un punto de inflexión en las bandas.
Cómo si fuera el clásico chiste o duda existencial (?): ¿de que lado caería si se le ata a un gato en la espalda una galletita con mermelada, "La Caravana mágica. Volumen 2" mezcla ambos momentos.
Este, como bien dice el nombre, está más emparentado musicalmente con su segunda placa que con su primer experimento de un tono más intimista. Sin embargo, las letras están más cercanas a "Suelto", explorando esta nueva etapa que mezcla momentos ClaudioMaríaDomínguezcos/EckhartTollescos/espirituales con el costado fiestero de Cordera, costado con el que parece haberse, de alguna manera, amigado.
En este nuevo material, Cordera desnuda su nueva vida a lo largo de nueve canciones, centrándose en las ambigüedades del humano, y más que del humano de él mismo, con temas en primera persona que le dan un tono confesional al disco.
Así, en "Canción para mi cabeza", sacará sus demonios en medio de una especie de cuarteto ("Con más neuronas que toda china es un ejército que me examina, es insistente más que una mosca, es una máquina que me da rosca"), en "Soy mi soberano", volverá al Cordera Suelto para mostrar todas sus personalidades ("Soy mi dolor, soy mi condena, soy el veneno de mis venas, soy mi remedio, soy mi cura, la enfermedad es mi cordura"), y en "India Negra Cumbia" contará su historia, en lo que sería una segunda parte de "Asalto de Cumbia" ("La Caravana Mágica. Vol. 1"), y regalará uno de los momentos más intensos del disco, cuando cante "El olvido tapa, el olvido esconde, el olvido entierra, nadie sabe adonde el olvido mata, el olvido duele y cuando olvidamos, lo que vive muere...Y yo no voy a morir esta noche sin dolerte", sobre un ritmo que va in crescendo apoyado en la fuerza de la voz de Soema Montenegro.

Con tres discos en su haber, Cordera y cía. muestra una evolución (y aceptación) musical que los encuentra en este material más consolidados como banda, y a la vez con un Pelado que parece haber encontrado (nuevamente) su camino y su lugar. En varios sentidos.

miércoles, 11 de julio de 2012

"Acá estamos", de Arbolito

"Acá estamos", es el nuevo material de Arbolito, una de las bandas precursoras (o al menos de las que más trascendió) en la fusión del folklore con rock, reggae y cumbia (música popular lo definirán), y que además tiene el plusvalor (¿quién diría?) de haber logrado que muchos jóvenes se acerquen a los ritmos autóctonos, y a cierta parte de la historia desde otro costado.
El nombre del disco tiene una doble concepción: por un lado, la banda está cumpliendo 15 años, pero además, para este, decidieron volver a la independencia, y alejarse de Sony, con quién habían trabajado en sus últimos dos álbumes ("Despertándonos" y "Cuando salga el sol").
"Volver", primer corte, es el tema que le da el puntapié inicial a la placa, un rock a lo Arbolito, con buenos arreglos de violines, que, a pesar de lo antes dicho, no habla de esta nueva etapa (¿o sí?), sino de volver al pueblo ("Yo sé que la ciudad no es para mí, golpea la vida y hay que seguir. Volver. El cóndor me ha visto volver"), ese pueblo sin nombre, que como una especie de Macondo aparece en todos los discos de la banda, y que su historia se parece a la de muchos.
Pero los puntos más interesantes llegarán desde la variedad, como en la cumbia "No somos nada", en la que con su ritmo pegadizo pone a los humanos en su lugar ("El cuentito azul de la creación y del infierno abominable se cayó de tu mostrador, algo aprendimos con los años. No somos nada, nada más que lo que somos, sólo un granito loco"), idea que volverá un poco más positiva, aunque en un tono más tranquilo, en "En un cristal" ("Nada que se haya inventado, nada que te vendan, nada se compara a esta bella esfera, en la que vamos viajando entre las estrellas"), una de las gemas del disco.
Claro que habrá tiempo para bajar de nuevo a la tierra y criticar a la televisión/sociedad en la cruda "Condenada Soledad", alabar una supuesta unión ejemplificadora latinoamericana ("Este Abrazo"), y hablar de las ambigüedades y contradicciones de la vida ("Sensaciones"). En definitiva, "Acá estamos" es un gran muestrario de la paleta sonora/temática que exploró Arbolito a lo largo de estos 15 años, y a la vez funciona como un buen autohomenaje para festejarlos.

viernes, 15 de junio de 2012

"La vuelta al mundo en 80 noches", de Federación Afrancesada de Fonk

El funk tiene una estrecha relación con la noche, la fiesta, el sexo, y esas partes interesantes y hermosas de la vida, sumados a un constante recordatorio al ritmo en cuestión (es casi imposible que pasen tres temas sin que se mencione al funk).
Fiel a estos preceptos, la Federación Afrancesada de Fonk (FAF) sacó su primer disco, y lo bautizó "La vuelta al mundo en 80 noches". En este material, la banda formada por Matías Fernando Baquera (voz líder y trompeta), Hutter Von Fonk (bajo y coros), Duke De Bernardi (guitarra y coros), y Lucas Hernández (batería y coros), se meten en el funk más puro, y demuestran una gran capacidad sonora, apoyados en los arreglos de la guitarra de De Bernardi más la base armada por la dupla Von Fonk-Hernández.
Frases como "Si el destino se cobra una vida muero feliz en la pista" ("Arenas Movedizas"), o una oda al fin de semana largo ("Friday"), sin olvidar el título del disco, demuestran que la noche (con todos sus condimentos) es la vedette del disco. Pero también, FAF muestra otras facetas cuando (en medio de una noche, claro) revive a esos personajes entrañables de los '80 que mantienen la estética funky en "Baracus' Saturday" ("Te voy a hacer la Mister T") o "Citizen Coleman" ("De qué es que tu me hablas Willys"), y hasta se animan a homenajear al rock con un gran mix de "Fanky", de Charly García con "Perra", de Viejas Locas, y algunos guiños a Sumo, en "Fonky Bitch".
Un disco completo que se puede escuchar (no bajar) gratis desde su bandcamp.

viernes, 8 de junio de 2012

"Desnaturaleza", de Fruta Deliciosa

El reggae es el género que más creció en los últimos años dentro de la escena local. De repente, cientos de bandas surgieron, dentro de todas las variedades y fusiones, crearon su espacio (que incluye lugares específicos, fiestas, etc), y hasta lograron meterse en los grandes festivales con noche propia.
Dentro de esta escena, surge Fruta Deliciosa, banda rosarina que en 2011 editó su tercer disco,  "Desnaturaleza".
En este nuevo material, la banda aborda el reggae aunque sin cerrarse en purismos, y lo mezcla con ska, cumbia y hasta folclore. Esta búsqueda hace que, a diferencia de muchos discos de este género, no parezca un solo tema/base de poco más de una hora con un muchacho cantando encima, sino que cada canción está arreglada con minuciosidad, lo que le da una identidad a las mismas. 
Además, tiene el plus valor de dejar de lado los dos clichés más grandes del genero (la palabra "Babilón" la mencionan una sola vez, y Jah es el gran ausente, al menos explícitamente), demostrando que no hacen falta para hacer buen reggae. Incluso, el tercer cliché es rozado de forma ambigua, aunque no parezca por el título, en "Florecerá".
Si es cierto que el arte surge mayoritariamente en los momentos críticos, Eduardo Alvarado, voz, guitarra y autor de todas las letras del disco, parece haber atravesado una profunda crisis personal (hablamos de amor, claro), y a la vez, ver algo similar en varios aspectos de la vida y del mundo. Esta visión (pesimista en su mayoría) quedó plasmada a lo largo del disco en canciones como "Infeliz felicidad" ("Quise ser tu libertad. Infeliz felicidad. Pero te vas. Pude darte algo mejor. Solo quise darte amor. Pero te vas de mí"), donde da su versión de una ruptura (más parecido a un abandono sufrido); "El Peón", en la que se carga a las clases dirigentes en sus diferentes acepciones; y "Desnaturaleza", un  reggae oscuro en el que regala una imagen desoladora del futuro del planeta ("Desnaturaleza, civilización. Memoria perdida, desinformación. Seamos bienvenidos al fin de nuestros días"). Pero todo esto lo cuentan/cantan con una serie de ritmos alegres que, por si solos, transmiten una cuota de optimismo, y que dan ganas de que, al menos en algunas cosas, Alvarado no tenga razón.

viernes, 1 de junio de 2012

"Tiempos difíciles", de The Locos

Mientras Ska-P termina de grabar su nuevo disco, Pipi, con su proyecto paralelo The Locos, aprovechó el parate (por llamarlo de alguna manera) y editó "Tiempos Difíciles", su tercera placa.
En este nuevo material, The Locos sigue explorando el ska más puro, con un sonido que dificulta demasiado diferenciar del de Ska-P. Incluso la temática abordada a lo largo de las 12 canciones que forman "Tiempos difíciles" (y los discos anteriores también) van por la misma línea de su banda original, con esa mezcla de pesimismo, crítica mordaz y un pequeño (a veces demasiado pequeño) brillo de esperanza.
Lo que debería preocupar al que escucha ambas bandas desde su comienzo (allá en 1994 donde nos avisaban de los problemas de los Reality Shows y hoy la tele de aire casi que se mantiene gracias a los Soñando, Cantando, y hermanos grandes), sobre todo si concuerdan con todos los mensajes, es de notar que nada cambió, salvo algunos nombres y formas.
Así, The Locos aborda temas como la explotación ("Contrato limosna"), la infaltable crítica a los políticos ("Partido de mierda"), al genero humano y sus  tratos hacia el planeta ("Espacio exterior"), el llamado a la revolución ("Aires de rebelión"), y el palo correspondiente para Estados Unidos ("Dueños del mundo"), todo adornado con un ska muy bien tocado, pero falto de sorpresas. Lo que no se puede negar es que "The Locos" deja clara su visión del mundo, y que, para muchos, sus discos son una buena postal de época. Y por lo que se escucha, también de épocas sin mayores sorpresas.

miércoles, 23 de mayo de 2012

"Blunderbuss", de Jack White

Pareciera que todo lo que toca Jack White, se convierte en oro. O al menos en buena música, que es igual o más valioso.
Luego de la separación de The White Stripes, el gran Jack había aparecido en escena con sus grupos  intermitentes The Raconteurs y The Dead Weather, y con algunas colaboraciones. Pero ahora, finalmente debuta como solista, con un combo de blues y rock clásico, no demasiado novedoso para el que sigue su discografía, pero no por eso menos genial.
En "Blunderbuss", el ex líder de los Stripes hace gala de su multiinstrumentismo (?) y se carga al hombro, por momentos, todo: guitarra, bajo, batería, piano y teclados, además de cantar. Claro que cuenta con ¿invitados? ¿banda? que también aportan en todos esos frentes (17 músicos participaron de la grabación, sin contarlo a él).
Dentro del buen nivel musical del disco se destacan "Trash Tongue Talker" en la que, como una especie de Jagger enojado, se despacha con un "Now you're tryin' to bring your garbage to me, I got some words for your ass", "Love interruption" en un tono más romántico/despechado, "I Guess I Should Go to Sleep", en la que se acerca al sonido Beatles, "Weep Themselves to Sleep", con el piano (parte fundamental a lo largo de todo el disco) siguiendo una hermosa melodía, mientras un sufrido White canta "No one can blow the shows or throw the bones that break your nose like I can, but the men that fall so deep in love, they start to weep themselves to sleep", y una gran versión de "I'm Shakin'" de Rudy Toombs.
En este nuevo material, White da una clara muestra de su versatilidad, calidad y constante búsqueda  musical, abre la puerta para una promisoria carrera solista, y se perfila para estar entre lo mejor de 2012.

viernes, 30 de marzo de 2012

"El Extranjero", de Nikita Nipone

"El Extranjero" es el tercer disco de Nikita Nipone, en el que siguen en el camino del rock cancionero con letras que mezclan el cinismo y la (auto) reflexión. En una búsqueda por reflejar el sonido exacto de la banda, los Nikita grabaron las bases en vivo, a la vieja usanza.
El resultado es un disco crudo, que los muestra en su estado natural, sin la necesidad de recurrir al clásico en vivo, y en el que predominan las guitarras, que toman la posta en los mejores momentos ("Apagar el motor", "Analía", "Opciones", "Mi Territorio").
La idea que sobrevuela este nuevo material es la que le da el nombre al mismo, tanto en el sentido literal ("Mi no entender. Mi no comprendo. Soy extranjero. Hábleme lento") como en otras acepciones: extranjero social ("No me importa el qué dirán, porque dirán tantas cosas que, ni siquiera escuchando, entendería los reclamos de la gente que no me deja ser"); extranjero en uno mismo ("Por eso hoy voy a apagar el motor. Voy a frenarme y retomar el control"); extranjero en la pareja ("complacer es querer ceder el trono del terreno que ideaste para vos").

Luego de Convoy Larrosa, el desaparecido proyecto que los unió momentáneamente a Andrés Calamaro y Jorge Larrosa, y con el que dejaron dos temas como registro, Nikita Nipone vuelve con un disco fiel a su estilo.
Como bonus track, mezclan los viejos modos de grabación con los nuevos tiempos de distribución (¿extranjeros temporales?), y lo dejan para que se pueda bajar gratis desde su bandcamp.

viernes, 16 de marzo de 2012

"La Revuelta", de Bersuit Vergarabat

Es injusto. Una banda crece por la capacidad/calidad de sus integrantes, por lo que pueden generar todos juntos, pero la voz es la marca identificativa. Y cuando se va el cantante, es difícil que continúe o que, al menos, no se resienta y que al oído de cualquier desprevenido suene como una banda nueva. Es injusto. Pero es real.
La separación en buenos términos de Bersuit Vergarabat terminó no siendo tal. Como resultado de esta, Cordera sorprendió con un gran disco ("Suelto") y lo continuó con un retorno a los hits/fiesteros/cumbieros ("La Caravana Mágica"). Por otro lado, Juan Subirá se despachó en un tono más introspectivo y bien alejado de su faceta bersuitera ("Fisura Expuesta"). Y casi todo el resto (Cóndor Sbarbatti, Daniel Suárez, Oscar Righi y Pepe Céspedes) armaron De Bueyes, y sacaron "Más que una yunta", un disco dominado por el sonido de Bersuit.
A fines del año pasado, con un comunicado en su página, la banda anunció su regreso, claro, sin Cordera, y unos meses después sacó "La Revuelta".
El mismo está plagado, ya desde el nombre, de (demasiadas) invocaciones al pasado, al cambio y a esta nueva etapa, en lo que pareciera una necesidad de reafirmación constante, como en "Cambiar el alma" ("Otra vuelta, hay más rosca en esta tuerca"), en "La Revuelta" ("Tiene que ver con revivir. Tiene que ver con recordar. Tiene que ver con cantar. Y estar en la Revuelta con Bersuit Vergarabat"), o en "Afónico", donde de manera ¿divertida? lo saludan a su ex compañero con un cálido "Adiós querido amigo, la puta que te parió". Lo que parecen haber olvidado es que la mayoría de los que van a escuchar "La Revuelta", escuchan a la Bersuit Vergarabat desde hace mucho, que se mantienen ajenos a estas peleas internas (hasta se habla de una traición en la canción), y, en definitiva, cantar en contra del Pelado (parte fundacional de la misma) les resta más que sumarles (¿qué van a hacer cuando en vivo surja el eterno "solo te pido que se vuelvan a juntar?).
Es más, aunque si uno quiere, en casi todas las canciones encuentra alguna mención a lo pasado, cuando abandonan este tipo de invocaciones, aparecen (que irónico) los mejores momentos del disco como en "Dios te salve", tema bien bersuitero, en "Santa Cecilia" con la participación de la inconfundible voz de Vicentico, en "Es solo una parte", donde vuelven a regresar con Andrés Calamaro, y en la gema "Cargamos".

Con un sonido que recuerda a la última etapa de la banda, "La Revuelta" marca el inicio de la era D.C., y a la vez funciona como un disco de transición para una banda acostumbrada a mutar. Con algunos altibajos, Bersuit volvió pero queda claro que la ida de Cordera los dejó (injustamente) heridos.

viernes, 9 de marzo de 2012

"La Orquesta del Titanic", de Joaquín Sabina y Joan Manuel Serrat

Luego de la exitosa gira que los unió en 2007, en la que por estos lares llenaron cuatro veces la cancha de Boca y pasaron por Mendoza, Rosario y Córdoba, Joaquín Sabina y Joan Manuel Serrat contraatacan pero esta vez, como debe ser, con un disco bajo el brazo.
Las once canciones que forman "La Orquesta del Titanic" fueron compuestas en conjunto, y son el resultado de la mezcla de dos estilos parecidos pero distintos. Así, pasa por momentos más Sabineros ("Después de los despueses", "Quince o veinte copas", "Cuenta conmigo"), y otros que recuerdan al Serrat de viejas épocas ("Martínez", "Canción de Navidad"), pero cada uno con claras influencias del otro. Un ejemplo de esto es "Idiotas, palizas y calientabraguetas" que mezcla un sonido ¿Serratero?/¿Serratista? con la prosa Sabinera ("Princesas, anoréxicas, fulanas, zulúes, japonesas, catalanas, Cualquier hembra merece un buen poeta menos la estrecha calienta braguetas")
En sus últimos discos solista, Sabina había remarcado que le costaba mucho escribir debido a su nueva felicidad junto a Jimena "Rosa de Lima" ("Es difícil escribir siendo feliz. Y yo ya llevaba varios años así… Imagínense, los domingos veía televisión con mi novia. Mis amigos me decían: ¿Feliz? ¿Tan bajo has caído, Joaquín?"). Por eso, para "Vinagre y Rosas" se juntó con Benjamín Prado (recién separado), y en esta oportunidad con su ex y actual compañero de gira.
Esto parece estar funcionándole (si bien es anterior, cabe recordar el grandioso "Enemigos Íntimos" junto a Fito Páez), ya que "La Orquesta del Titanic" resulta en un conjunto de muy buenas canciones como "Hoy por tí, mañana por mí" en la que incluso arman una reunión cumbre con Mario Benedetti, la mencionada "Después de los despueses" que recuerda por momentos a "19 días y 500 noches" en versión más lenta, o la sometida "Cuenta conmigo" ("Si buscas alguien que te trate mal cuenta conmigo... Y si se trata de tratarte bien/ Mejor que un millonario sin dinero/ Olvídate de chulos todo a cien/ Por ti seré un perfecto caballero")

Con este nuevo material, Sabina y Serrat abren la segunda etapa de esta sociedad y, sumado al grato recuerdo de 2007, generan gran expectativa para los shows que se vienen.

miércoles, 29 de febrero de 2012

"Pequeña Orquesta de Trovadores", de Pequeña Orquesta de Trovadores

En los últimos años, el jipismo (por llamar así a un formato más acústico utilizando la nueva nomenclatura impuesta por el gran Capusotto, algunos dirán folk/indie) está viviendo una nueva era dorada en Argentina que tiene como principal exponente a Onda Vaga y todos sus brazos (hasta armaron un Festivago todos juntos). Incluso, por el lado internacional, Eddie Vedder sorprendió dentro de esta línea con su disco "Ukulele songs" en el que, entre otras cosas, se anima a autoversionar a su Pearl Jam ("Can't Keep").
Dentro de este marco surge Pequeña Orquesta de Trovadores, un quinteto que debutó el año pasado con su disco homónimo en el que, entre melodías dulces, voces mixtas, arreglos que suman encanto a las canciones, y letras que mezclan buenas historias con algunos momentos de simpleza extrema, hacen su carta de presentación.
Los puntos altos aparecen de la mano de los personajes y situaciones que combinan rasgos entre humanos y maravillosos como en la cancionera "El loco del 9no A", en el foxtrot "Los seis amigos del revolver", y en las historias de amor "Caramelos de limón" y "Una noche". Aunque la gema es la crítica/comparativa/declaradora de principios "Cowboy" ("Y vos siempre vas para donde te lleven, no tenés mucho para enloquecerte. Yo, en cambio voy a donde quiero, como un cowboy no me para ni John Wayne"), con un ritmo más rockero y repleta de arreglos interesantes.
Y sí, se puede escuchar gratis desde su bandcamp (o comprarlo al precio que se quiera).

viernes, 3 de febrero de 2012

"Perfecto", de Mostruo!

Bandcamp es una herramienta que todo melómano y toda banda que quiera dar a conocer su arte debería utilizar. La misma da la posibilidad, al que tenga ganas de descubrir nueva música, de, con un simple click, escuchar discos completos y, dependiendo de la elección de la banda, bajarlo gratis o por algunos dólares (y sí, es el dios mundial), y a las bandas, de subirlo, decidir el precio, y la opción de agregarle el arte, los datos de grabación, invitados, calidad, etc.
En los últimos meses, dentro del tag "Argentina", uno de los discos más populares es "Perfecto" de Mostruo!, tercer material de la banda platense que salió a fines de 2011.
En este nuevo trabajo, Mostruo! revitaliza el espíritu del rock de los '70, con algunos toques funks, apoyado en la dupla interpretativa/guitarrera de Kubilai Medina-Lucas Finocchi, y el apoyo superlativo del tándem formado por Federico y Luciano Mutinelli.
Con una gran calidad musical, la banda, como una especie de Shang Tsung (?), muestra su personalidad, que por momentos regala algunas gemas con un sonido más "Mostruoso" ("El Capitán", "Allá está"), pero que no teme fusionarse sin perder su esencia, o tomar el alma (como para que lo de Shang Tsung tenga sentido), con el Spinetta (¡fuerza flaco!) de aquellos años ("El Fracaso"), con algunos rasgos JamesBrownescos ("El más allá"), y, claro, con el patriarcal Manal ("La Feria Jipi", "Las cosas que fueron antes").
Además, para los amantes del objeto, "Perfecto" tiene una hermosa edición física con el diseño a cargo de Kubilai. Para Los Otros, lo pueden escuchar por acá.

viernes, 27 de enero de 2012

"Excursión al Zoo", de Izquierda Champagne

"Excursión al Zoo" (2010) es el disco debut de Izquierda Champagne, en el que incursiona en el rock con tintes funk y algunos (los menos) pop, y con una fauna propicia, donde el Zoo no es más ni menos que el mundo entero.
La banda está liderada por el "Tano" Mugnolo (también conocido como Paco Belfiore), un líder carismático (piensen en la primera banda que se les venga a la cabeza con un tano a la cabeza y todo lo que eso significa, y ya se van a hacer una idea del señor, salvando las distancias, claro), que se hace cargo de la voz, el teclado, y las letras, en las que juega con personajes y situaciones, utilizando el humor y la ironía como herramienta principal.
La banda se completa con Juan Carena (batería), Martín García Reinoso (guitarra y coros), Nicolás Simone (guitarra) y Ramiro Vulijscher (bajo).
El mismo Mugnolo (o Belfiore, como gusten) pareciera ser el protagonista de dicha excursión que incluye noches largas ("Trago duro"), un viaje funky por Río con un objetivo claro ("Hola minina, tudo bem. Dicen que en Brasil se coge"), personajes adicionales no menos importantes ("La Droguería de Nick"), crítica social a su manera ("Pobres contra pobres"), homenaje idiomático a sus orígenes ("La desgracia de Non Nicola"), y una noche lisérgica (a causa de estar aburrido del Counter Strike) en la canción que le da nombre al disco.
Ajeno al protagonismo que toma el "Tano" por su fuerza interpretativa y sus letras, la banda que hay por detrás (o al costado para ser justos) tiene presencia propia, y con un gran manejo de ritmos y climas dotan de un excelente nivel musical a cada una de las canciones.

En su primer disco, Izquierda Champagne mezcla virtuosismo, excentricidad y humor en la dosis justa, y deja las puertas abiertas a un futuro promisorio.

lunes, 23 de enero de 2012

"Metamorfosis", de El Vuelo de la Grulla

El Vuelo de la Grulla es el nuevo proyecto de Sebastián "Roger" Cardero, ex baterista de Los Piojos y uno de los pocos integrantes de la banda de Palomar que todavía no había sacado nada post separación (el otro es Micky Rodríguez, sin contar al guitarrista por horas, Juanchi Bisio). Pero el que espere encontrar alguna reminiscencia piojosa, que busque por otros lados, ya que nada de lo que sonará a continuación recordará aquellos tiempos. Ya desde el nombre del disco ("Metamorfosis") como el de la banda, que refiere al vuelo migratorio de la grulla, la banda deja en claro que lo que busca, como punto de partida, es un cambio, un volver a empezar.
Para esto, "Roger" se juntó con su hermano Fernando en bajo y Guillermo Cudmani, en voz y guitarra (ambos ex Audire), y sacaron, a fines del año pasado, su disco debut, en el que se mueven entre el grunge y la psicodelia, apoyados en un sonido que mezcla suciedad y potencia en perfecta armonía. La batería de Cardero tiene un protagonismo esencial (escuchar el comienzo del disco o el final de "Agua de mar" abalan esto), siempre bien acompañado por el bajo familiar, y la guitarra de Cudmani, que en su voz e interpretación recuerda por momentos al Skay solista.
Si los que buscan rastros piojosos siguen por ahí, escuchen "Chico viejo", dedicada a “Tavo” Kupinski, viejo compañero de banda que ya no está ("Chico izquierdo, chico viejo, no te puedo encontrar. Ya no estás, no estás. La marea que te aleja hasta otro lugar. Donde no puedo encontrarte, donde no puedo estar.."), pero los que realmente quieran conocer la metamorfosis, prueben con "Duerme niño", "Misiles" y "Sucede", que ahí van a encontrar el gen de este nuevo proyecto.

jueves, 19 de enero de 2012

"Licenciado Cantinas", de Enrique Bunbury

En el mismo camino que "Canciones para aliens" de Fito Páez (aunque sin el proyecto extraplanetario), Enrique Bunbury eligió 15 canciones para homenajear y repasar la música latinoamericana, zona geográfica en la que se encuentra a gusto y siempre es bien recibido.
Como una especie de disco conceptual, Bunbury arma una (típica) historia de amor/desamor, a través de la visión del que durante el proceso se convertirá en el Licenciado Cantinas (y que le dará el nombre al disco), una especie de macho/galán/sufrido/abandonado. Y para contar este tipo de historias, nada mejor que hacerlo a través de rancheras, tangos, chacareras y cumbias, que tan bien sabe interpretar.
La historia, que será convertida en un cortometraje por el director algecireño Alexis Morante (el próximo 20 de enero, lo presentará simultáneamente en España y América Latina, y se llama "Licenciado Cantinas The Movie"), va pasando por todos los estadios del desamor: del amor puro ("Somos hojas en el viento, juntos más alto subimos"), al despecho ("Para qué quiero vivir con el corazón deshecho. Para que quiero la vida después de lo que me has hecho"), pasando por los pedidos, a veces incomprensibles, del abandonado ("ódiame sin medida ni clemencia, odio quiero más que indiferencia porque el rencor quiere menos que el olvido"), para volver a la noche y convertirse en el nuevo álter ego bunburyano ("Cuando llegue el licenciado a la fiesta, todo el mundo lo va a contemplar. Y la negra más linda que encuentre, te aseguro la voy a enamorar"), claro que consciente de cómo llegó hasta ahí ("Si he venido a este mundo es pa sufrir, no puedo encontrar la dicha en la mujer, si me besan y me entregan su querer, se me alejan para hacerme un infeliz"), y que no terminará de la mejor forma ("En lo alto de la sierra, me detuve a descansar. Pero sentí que me iba sin moverme del lugar")
Entre los artista elegidos para homenajear, aparecerán Agustín Lara ("El mar, el cielo y tú"), Louie Ortega ("LLévame"), Alfredo Gutiérrez ("El Solitario"), y Atahualpa Yupanqui ("El cielo está dentro de mí"), entre otros.

Si bien, la idea de escuchar un disco de versiones no suele ser la más atractiva, el proyecto conceptual sumado a la buena musicalización y la siempre impecable capacidad interpretativa de Bunbury, hacen de "Licenciado Cantinas" un disco interesante, y la calidad de imagen del trailer/corte "Ódiame" deja con ganas de ver, por lo menos para saber cómo lo llevan, el corto con la historia completa.

jueves, 12 de enero de 2012

Lo mejor de 2011 (el año antes del fin)

Después de tomarnos unos días de debate (por eso llega unos días tarde) en una maravillosa playa caribeña (gastos a cargo del blog, claro), todos (?) los que hacemos Medio Objetivo definimos en voto unánime lo que nos parece lo mejor que pasó en materia musical en 2011. Para no salirnos de la clásica, aunque sin orden establecido, armamos una clase de podio, o sea, elegimos tres discos, tanto en el orden nacional como internacional. Estos son los ganadores (pueden pasar a buscar su premio):

Discos Nacionales:

- "La calesita de Mamanis", de Las Manos de Filippi
En este material, la banda liderada por Hernán "Cabra" de Vega reedita algunos de sus clásicos (esto hizo poner en duda su participación en los mejores discos de 2011) dispersos en sus diferentes proyectos y los revitaliza con un sonido actual, mezclados con temas nuevos, en lo que marca un nuevo comienzo para la banda.


- "Non Stop!", de Dancing Mood.
Disco triple formado por 46 canciones con las que intentan hacer una reconstrucción histórica del legado ska mundial, que va de las raíces jamaiquinas hasta las nuevas voces.
Participan, entre otros, Pauline Black ("Briston & Miami"), cantante de The Selecter; Rico Rodríguez, considerado uno de los trombonistas más importantes de Jamaica por el lado extranjero; y “Maikel” de Kapanga, Flavio Cianciarulo, y Pablo Lescano del ámbito nacional.



- "Mugre", de Acorazado Potemkin
Acorazado es un power trío formado por músicos de larga trayectoria en el Rock Nacional: Juan Pablo Fernández (Pequeña Orquesta Reincidentes) en la voz y guitarra, Luciano Esain (Valle de Muñecas,Motorama, Flopa Manza Minimal) en batería, y Federico Ghazarossian (Los Visitantes, Don Cornelio y la Zona, Me darás Mil Hijos) en el bajo.
En su disco debut, explotan al máximo un sonido de rock más clásico, apoyado en la lírica/interpretación de Fernández que regala la mejor canción del año ("La mitad") con la mejor frase, claro ("si es cierto que lo nuestro termina, si es cierto que hay que hacerle un final, entonces quiero que te lleves mi hombro izquierdo, que sin tu pelo no lo voy a usar jamás"), todo esto apoyado en el magnífico tándem Esain-Ghazarossian (apellido que obliga a Copiar/Pegar).

Discos Internacionales:

- "Angles", The Strokes
En su regreso tras 5 años de separación, en el que dejaron interesantes discos cada uno, The Strokes volvió con su rock garagero (y algo más), hicieron su mejor álbum desde su debut "Is this it", y como si fuera poco, vinieron y volaron cabezas a mansalva en un show impecable en GEBA.






- "Suck it and see", de Arctic Monkeys
Cuarto disco de los Monos del Ártico, una de las bandas inglesas más interesantes de los últimos años, que, si bien con el correr de los años fueron bajando decibeles y compases, sobre todo si uno los compara con el maravilloso (e indispensable) "Whatever People Say I am That's What I'm Not", vuelven a regalar un puñado de buenas (rockeras) canciones. Y encima, el año que viene (que es este) lo vienen a presentar.




- Noel Gallagher's high flying birds
En su debut solista, tras la separación de Oasis, Noel Gallagher, explota al máximo su capacidad para hacer grandes canciones, y demuestra con creces por qué era considerado la mitad más uno de aquella banda. Igualmente, vale la pena escuchar el disco de su hermano y cía.





Shows a los que deberían haber ido, sino fueron, claro:

Nacional:
Alvy, Nacho y Rubin llegaron al ND Ateneo con su segundo disco de versiones argentinizadas de las "69 love songs" de Stephin Merritt, y dieron un show perfecto (jipi), con invitados varios, y un sonido fiel al de las grabaciones.

Internacional:
Ya fue comentado en el disco, pero lo que hizo The Strokes en su show en GEBA estuvo más allá de toda expectativa. Solo necesitaron de una hora y media para dar una clase de cómo se da un show valiéndose solo (?) de su música (ahí tenés U2).

miércoles, 11 de enero de 2012

"Contra la pared", de Viejas Locas

Para darle un motivo más consistente (o intentar hacerla más interesante) a esta nueva etapa que comenzó en 2009 con aquel (conflictivo) show en Vélez, Viejas Locas lanzó a fines del año pasado "Contra la pared".
En este nuevo material, la banda vuelve al rock crudo/barrial que la caracterizó (salvo en el sorpresivo flamenco "Un frasco vació" con tintes sabineros), y Pity a desnudar sus vivencias en las letras, en el papel de compositor-protagonista de la banda sonora de su vida. Y dentro de este "volver a empezar" rescatan varias canciones anteriores a su disco debut ("Viejas Locas", 1996) que nunca fueron grabadas ("Ella no me quiere creer", "Roca y giro", "Tirado en la estación", "Guacho caracú").
A lo largo del disco, Viejas Locas muestra, en algunos (escasos) momentos, una madurez musical que le permite jugar (o rozar) con un sonido cercano a AC/DC ("Contra la pared"), pasar de los Rolling Stones a una especie de "Celebration" de Kool & The Gang ("Bailando en el infierno"), mezclar un rock puro con coros sesentosos y un estribillo con Vocoder de tintes reggaetoneros ("Ella no me quiere creer"), y hasta meter el famoso arpegio de "Rezo por vos" en una canción biográfica ("En problemas"). Pero en otros (la mayoría) vuelve a caer en un sonido monótono en el que pareciera auto plagiarse, y Pity, aquel poeta barrial que tiene grandes composiciones en su haber y que tiempo atrás supo convertir la simpleza en genialidad, esta vez no lo logra, y la simpleza queda en eso: simpleza pura.

En estos tiempos donde todas las grandes bandas recurren a sus grabaciones descartadas para sacar ediciones de lujo, a veces hay que recordar el por qué fueron dejadas de lados, y volver a cerrar el cajón.

jueves, 5 de enero de 2012

"Canciones para aliens", de Fito Páez

Desde que perdió su lugar entre los mimados del rock (de esto ya hace tiempo), Fito Páez se dedicó a darse gustos, y a preocuparse menos por las críticas. Estas libertades lo llevaron a hacer grandes cosas que, masivamente, pasaron desapercibidas, pero a la vez, las mismas libertades pueden ser las (únicas) que expliquen el porqué de su nuevo disco, "Canciones para aliens".
En este, junto a Leo Sujatovich y gran elenco, el rosarino recoge "las canciones más hermosas del mundo", entre las que, curiosamente o no, no hay ninguna de su amplia discografía, y las reversiona libremente, con traducciones polémicas incluidas.
Así, puristas abstenerse, Páez se anima a meterse en la piel de Freddy Mercury en una versión mucho más que libre de "Somebody to love" ("Las dos caras del amor"), en la de Dylan en "Ring them bells" ("Doblen Campanas"), y llega a límites insospechados para el "Va, Pensiero" de Giuseppe Verdi y "Rata de dos patas" de Eduardo Norberto Toscano (escucharlo como recita el "cuanto te odio y te desprecio" le dará bronca hasta el más "Fitopaezista")
Sin embargo, el disco regala algunos buenos momentos, sobre todo cuando Fito se mueve entre los ritmos y artistas que más se acercan a su estilo, como en "Un beso y una flor", para los más grandes inmortalizada por Nino Bravo, para los más jóvenes por Seguridad Social; en "Construcción" de Chico Buarque, quién además participa en "Tango (Promesas de amor)" de Ryuichi Sakamoto; o cuando respeta las originales ("Yo no quiero volverme tan loco" de Charly García, "Fiesta" de Joan Manuel Serrat y "El breve espacio en que no estás", de y junto a Pablo Milanés).
Según las palabras de Páez, este sería el primero de una serie de discos que harán junto a Sujatovich en los que incluirán "otras canciones de otros lugares y otros autores". Además, en estos días, "Canciones para aliens", a través del proyecto "Música al espacio", una iniciativa conjunta entre Sony Music y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), será transmitido al espacio exterior (de ahí el nombre del disco). Como la primera impresión solo se puede dar una vez, y en este caso, si es que hay alguien allá afuera, será a través de la música, esperemos que ya les haya llegado el envío Beatles.